La ministra de Igualdad aspira a crear «otro
modelo de masculinidad». Para ello anunció hace más de un año la puesta en
marcha de un teléfono de orientación para hombres que sigue comunica

Así será el servicio
Se prestará a través de un número 900
Atenderá todas las llamadas desde cualquier punto de España
El servicio se prestará en castellano y se habilitará una franja de
4 horas una tarde a la semana para el resto de lenguas cooficiales
Tendrá un horario habitual de 9 a 23 horas de lunes a viernes.
Fuera de este horario, la empresa dispondrá de un contestador automático
Se creará un servicio «on line» paralelo a través de la página web
de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, accesible a través de
la del Ministerio de Igualdad
La respuesta será inmediata, salvo que requiera contactar con otras
fuentes, y en ningún caso sobrepasará las 72 horas desde su
recepción
Comienzos de junio de 2008. La ministra de Igualdad, Bibiana Aído,
acude al Congreso de los Diputados. Es su primera comparecencia parlamentaria y
allí expone los objetivos prioritarios de su departamento para la presente
legislatura. Entre sus propuestas, sorprendió a todos con el anuncio de la
creación de un teléfono específico de información para los maltratadores. Al
menos eso fue lo que entendieron los diputados y periodistas presentes al
escuchar a la ministra explicar que el citado teléfono nacía «para ayudar a los
hombres a resolver de forma pacífica todas las cuestiones surgidas en los
conflictos de pareja en vez de recurrir a la violencia». Una pretensión que
inmediatamente desató las especulaciones y las críticas por lo que la ministra
no tardó en matizar la propuesta y, sólo 24 horas más tarde, aclaraba que en
realidad el servicio no era para los maltratadores, sino para «resolver
dudas».
Hombres
perdidos
Porque, según aseguró entonces, «muchos hombres se encuentran
perdidos ante el inicio de la ruptura del sistema patriarcal y muchos presentan
dudas acerca de cómo asumir su paternidad, la corresponsabilidad en el cuidado
de sus hijos e hijas, en las tareas domésticas, sobre su salud
homosexual...».
Total que ni la propia ministra tenía muy claro cuando expuso su
proyecto ante los parlamentarios de qué iba en realidad una de sus propuestas
estrellas. No es de extrañar, por tanto, que se haya tardado más de un año en
perfilar los detalles del polémico teléfono. El pliego de condiciones para la
adjudicación de lo que finalmente será «un servicio telefónico y «on-line» de
información y orientación en materias y en cuestiones relacionadas con los
hombres y la igualdad de género» no se conoció oficialmente hasta el 6 de mayo
de 2009. Un largo año para completar la redacción de seis folios y medio, que es
lo que ocupa el citado documento.
Diferente
percepción
En el mismo se insistía en que uno de los objetivos del Ministerio
es el de contribuir a crear «otro modelo de masculinidad» y se justificaba su
creación por la diferente percepción que tiene hombres y mujeres sobre la
violencia de género. El teléfono, un 900, por supuesto aún sin asignar, será
asesorado por «asociaciones de mujeres de constatada experiencia en el ámbito de
la lucha contra la violencia y de organizaciones de hombres comprometidos con la
igualdad de género».
Servirá en teoría, según consta en la descripción del servicio,
para: «Facilitar a los hombres interesados en estas cuestiones de Igualdad
enlaces y recursos que potencien y canalicen sus posiciones igualitarias:
ponerles en contacto con las organizaciones de hombres igualitarios, informarles
sobre lecturas...». Asimismo debería ser útil para «informar a los hombres sobre
sus derechos en materia de conciliación de la vida personal, familiar y laboral,
relaciones paterno-filiales, separación y divorcio, custodia de hijos e
hijas».
Y, entre otras cuestiones más secundarias, se deberá utilizar para
«responder y orientar en las cuestiones surgidas tras situaciones de ruptura de
pareja y los conflictos que se puedan derivar del nuevo contexto».
El caso es que hasta el 17 de junio no se publicó en el BOE el
anuncio de licitación de esta prestación. Se supo entonces que el presupuesto
ascendía a 1.206.896,56 euros para dos años, aunque se podría llegar a gastar
una cantidad máxima de 1,4 millones de euros a razón de 234.000 euros en 2009,
700.000 en 2010 y 466.000 en 2011.
Empresa líder
El 12 de agosto pasado se publicaba el anuncio de la adjudicación
definitiva. Ganó el concurso la empresa líder en el sector de los teleservicios
en España, Qualytel Teleservice, la misma que puso en marcha y gestiona el 016,
el teléfono confidencial para maltratadas.
Parece pues que la gran idea de Bibiana, su gran aportación a la
Igualdad, su teléfono para la otra masculinidad, está ya próximo a encontrar
cobertura, a dejar de comunicar y a empezar a funcionar. Sin embargo, en el
Ministerio, cuando se pregunta, aún no son capaces de dar una fecha concreta
para su definitiva implantación, aunque debería estar a punto de
caer.